Muchos somos los que deseamos terminar con nuestras hipotecas y no deberle nada al banco por la compra que en su día hicimos de nuestra vivienda. Los afortunados que ya han saldado su deuda con el banco o que les quede muy poco, deben saber que proceso no finalizada con el pago del último recibo de hipoteca ya que registralmente seguirá apareciendo la carga hipotecaria. La cancelación registral no es obligatoria (pasados 20 años la información registral caduca), pero si es necesaria si queremos vender la vivienda o pedir una segunda hipoteca sobre la misma.

La cancelación registral lleva asociada una serie de gastos y la puede realizar uno mismo ya que si se lo encargamos al banco o una gestoría el coste será mayor.

Los pasos que hay que seguir los siguientes:

• Solicitar el certificado de saldo de deuda cero a nuestro banco. Éste está obligado a proporcionarlo de manera gratuita.
• Acudir al notario con dicho certificado para realizar la escritura de cancelación. Deberá ser firmada por un representante de la entidad bancaria sin ningún coste para nosotros.
• Acudir a la delegación de Hacienda para liquidar el Impuesto de Actos Jurídicos Documentados, modelo 600.
• Con la escritura de cancelación y la liquidación del impuesto acudir al Registro de la Propiedad correspondiente para su inscripción y posterior levantamiento de la carga.

Con estos sencillo pasos nuestra vivienda quedará totalmente libre de cargas. Pasado un tiempo es aconsejable pedir una nota simple para asegurarnos que el proceso ha culminado con éxito.